El tema es ir en canoa río arriba (todavía no sé porqué), con lo práctico que es dejar que te lleve la corriente... En cada canoa vamos 3 guiris, porque señores, yo aquí a pesar de mi pelo negro tizón, soy guiri, :D Estoy demasiado blanca y tengo la nariz demasiado grande como para que me confundan con las locales :)
Para que las turistas no se cansen van dos filipinos (uno delante y otro detrás) que reman por ti, además de dejarse los riñones empujando por la canoa cuando encallamos en zona de piedras.
La situación da bastante apuro, la verdad. Aquí a los occidentales nos tratan como marqueses. Me estoy malacostumbrando a que me abran la puerta en todos lados, a que me metan la compra en bolsas y por supuesto luego me las lleven donde yo diga, en definitiva, aquí estoy en modo jequesa. Ya veremos qué tal cuando vuelva a España, el contraste va a ser tremendo!
Con esta foto podéis comprobar que en Filipinas cualquier sitio es bueno para poner una virgen, santo o cualquier otro motivo religioso. Dicho sea de paso, maldito el favor que le ha hecho la religión a esta gente, donde la prohibición de la iglesia de usar anticonceptivos (aquí en algunas zonas no hay nada de eso) provoca que haya familias con tropecientos hijos que no tienen qué llevarse a la boca, no sigo que me cabreo :/
He intentado sacar las fotos lo mejor posible, pero no reflejan lo bonito que es el sitio, ascendiendo por un desfiladero muy profundo rodeado de vegetación exótica, muy poético todo. Y respirando aire puro, todo un lujo por estos lares! :)
Si os fijais al fondo de la imagen hacia la izquierda se puede ver una balsa-peaje en medio del río, otra especialidad filipina: sacar tajada de dónde se pueda! :o La podéis ver abajo con más detalle, es típica, típica.
Al llegar al final... tremendo cascadón
La atracción turística consiste en ir en la balsita de bambú, mientras los filipinos tiran de la balsa con unas cuerdas hasta pasar por debajo de la cascada. Hubo quien comentó que era la típica atracción que luego sale en las páginas de sucesos en España... mal momento para comentarlo, pero tampoco le faltaba razón...
Otro apunte sobre el tema seguridad son los megacascos que llevamos, al parecer hay monos que tienen la costumbre de tirar piedras a los incautos que pasan por allí en canoa, muy majos ellos. Yo la verdad es que no vi ninguno, afortunadamente :)
Una vez hecha la turistada, bajamos a comer a un restaurante en la ribera del río, ese que se puede ver en las fotos con agua de color verdimarrón sospechosa :S Y justo después de comer, llegó la procesión
Había dos barcas grandes repletas de chavalería bailando al son de la banda de música que iba en una de las barcas, imagen viva del donde caben dos, caben 50 o más! Digo que era una procesión porque una de las barcas llevaba una virgen (como no!), pero por todo lo demás: despiporre vario, música, baile (streptease incluido)... de procesión nada, tiene más de fiestas ibicenca que la idea de las procesiones de semana santa tradicionales. Se ve que aquí cada uno vive la religión como le da la gana y que decirles a tus amigos a ver si os vais de procesión debe ser lo más de lo más
Comentar una tradición curiosa de aquí, cuando pasan las barcas y canoas acompañantes, la gente que está a orillas del río les tira huevos (cocidos), el objetivo es que los huevos caigan dentro de las canoas, parece fácil, pero no lo es :D Además, la gente que va en las canoas se tira a recoger los huevos. El espectáculo de sobremesa fue genial :D